En el siglo XXI hay quien dice que los viajes en el tiempo nunca serán posibles porque de serlo, ya habríamos tenido visitantes del futuro... Y ¿ cómo saben que no los hemos tenido?
18 de octubre de 1999. Eran las doce de la noche y Tania aun tenía resaca de la noche anterior, estirada en el sofá y envuelta en una manta se tragaba resignada una patética película de dramas familiares por la vagancia que le producía pensar en levantarse y buscar el mando entre los cojines.
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18 de octubre 2313, Escondido entre los escombros y la chatarra e intentando hacer el menor ruido posible Samuel desmontaba la cabeza de un robot para conseguir la última pieza que le faltaba, la clavija conectora del ojo izquierdo, que necesitaba para su visor.
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Tania estaba a punto de quedarse dormida cuando llegaron sus compañeros de piso y el ruido de la llave al abrir la despertó.- ¡ Pizzaaaaa...!- gritó ella mientras entraban sus tres compañeros- Quiero pizzaaa... ¿ No tenéis hambre ?
- Sí, - respondió Mario- venimos del bar de abajo de tomar unas cañas. Podíamos pillar unos bocatas allí.
- Noo.. Yo quiero pizza, me apetece pizza- insistió Tania.
- Yo voto pizza también, comí un bocata al mediodía- dijo Loro.
-Como todos los días- Dijo Rubén mientras se tiraba en el sofá donde estaba Tania estirada ocupándolo todo - Pizza pizza pizza...- repetía.
Ponerse de acuerdo en lo que cenarían era fácil, lo complicado venía a la hora de decidir quien lo cocinaba, quien bajaba a comprarlo o quien llamaba para pedirlo.
En esta ocasión lo resolvieron con un sorteo y le tocó a Tania llamar a la pizzería.
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La máquina estaba completa, ahora Samuel tenía que buscar un lugar abierto sin llamar la atención de los Beabots pues llevaba encima infinidad de piezas de robot y le identificarían como tal. Antes de ponerse en marcha respiró hondo y pensó con calma. La máquina pesaba bastante y para ayudarle a soportarlo llevaba un hexoesqueleto en las piernas, una de las rodillas del hexoesqueleto estaba dañada y hacía un ruido. No podía repararla con las herramientas que tenía y ese ruido podría delatarlo, así que decidió quitarselo y aguantar con el peso.Se centró en la pantalla táctil de su brazo izquierdo unos segundos e introdujo unos datos. Activó el visor que le permitiría comprovar el estado del lugar de destino, miró a su alrededor, respiró hondo una vez mas y echó a correr entre los edificios.
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-Siempre me toca a mi...- protestó Tania- Hola quería hacer un pedido a domicilio.- Lo siento- dijo la pizzera- pero ya pasan de las doce, ya no llevamos a domicilio. Te puedo tomar nota y lo preparamos, pero tendrías que venir a recogerlo.
Y una vez mas el mismo problema...
- Yo estoy en pijama
- Yo fui la última vez
- Yo... acabo de empezar una partida en el Age of Empires...
- Ya voy yo... - dijo Rubén- Qué petardos sois...
- ¿ Y si alquilamos Matrix? - Dijo Loro.- Creo que ya salió.
- ¡ Ey, es verdad ! Vale pero entonces baja tú también y vas al videoclub mientras yo voy a por la cena.
- ¿ Quién tiene la tarjeta del videoclub ?
- ¡ Loro, la usaste tú por última vez !- le increpó Tania- Siempre la pierdes.
- La dejaste en el mueble de la entrada- dijo Mario sin apartar la vista de la pantalla del ordenador.
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Samuel cruzó la manzana sin problemas y encontró un un descampado que parecía adecuado. Solo tenía que bajar una empinada cuesta de tierra.- As-TRID, dame la diferencia de altura del terreno entre ambas fechas.- dijo dirigiéndose a su asistente electrónico.
- " La diferencia es tan solo de un metro"
- Según las lecturas del visor parece una zona bastante amplia entre edificios.
- " Deberías preocuparte por la patrulla de Beabots que se acercan por el suroeste, están a 200 metros"
Seis robots soldado aparecieron de entre los edificios, los dos que iban en frente se hicieron a un lado y se detuvieron para apuntar con su arma, los demás siguieron avanzando velozmente hacia Samuel.
Tenía que decidir rápido, huir entre los edificios e intentarlo mas tarde o precipitarse por la cuesta, huir de los Beabots en campo abierto y activar el dispositivo de salto. La máquina estaba lista y había encontrado el sitio, no podía ser de otra manera.
Saltó al barranco justo cuando los robots dispararon y uno de los proyectiles impactó junto a su pié. Intentó correr pero había demasiado desnivel e iba demasiado rápido, se fue de morros y rodó aparatosamente a toda velocidad barranco abajo, los robots llegaron al borde y se prepararon para disparar pero entre vuelta y vuelta Samuel consiguió alcanzar los controles de su brazo, activó el dispositivo y desapareció en un explosión de luz justo cuando los Beabots dispararon.
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Así que Loro y Rubén se fueron a por la cena y una peli. La pizzería estaba al fondo de la calle, a unos 300 metros, y el videoclub un poco mas abajo en la calle paralela.- Bua, yo me quedé flipadísimo cuando la vi en el cine- comentaba Loro mientras caminaban calle abajo.- vas a flipar con la escena de Trinity en la que...
- No me cuentes nada !
- No era nada importante..
- Me da igual, no quiero saber nada.
- ¿Cuál era la confraseña de la tarjeta?
- Uf... ¿ 3357 ?, no, espera... 33...
- ¿ 3327 ?
Seguían hablando mientras atravesaban la plaza cuando de repente se produjo ante ellos, a unos diez metros, una intensa explosión de luz que los lanzó a los dos al suelo y de la que salió una persona que cayó junto a ellos.
La luz les cegó y durante unos segundos no podían ver bien. Junto a ellos, tumbado boca abajo, se encontraba un hombre que parecía medio robot, intentaba levantarse pero estaba aturdido y le costaba respirar. Su imagen vibraba, como la de un televisor desajustado, y durante breves fracciones de segundo se podía ver a través de él, como si fuera un holograma. En principio no sabían que hacer pues todo aquello era muy extraño pero le ayudaron a sentarse, se fue recuperando y las vibraciones y los parpadeos fueron desapareciendo. Su cuerpo estaba lleno de partes mecánicas, circuitos, luces... En su brazo izquierdo tenía varias pantallas pequeñas, llevaba un visor en un ojo y una especie de malla en la cabeza y en la espalda llevaba un montón de aparatos con ventiladores pequeñitos y un montón de luces y cables. Pero no parecía que todo aquello fuese parte de él, mas bien parecía algo que llevaba puesto.
- ¿ Dónde estoy ? Repetía continuamente.
- En la calle Aragón- le dijo Loro.
- No... Cuando, cuando... Perdonad- ya parecía estar casi recuperado.- No me debería ver nadie con esto, ¿ Tengo que encontrar un sitio donde... quitármelo y guardarlo.
Rubén y Loro se miraron uno a otro dudando la respuesta.
- Tania nos mata- dijo Rubén.
- Ya...
- Qué leches, salió despedido de una cacho explosión de luz y lleva puesto un montón de cosas raras que... no sé que... ¿ Qué es ? ¿ Una especie de máquina del tiempo o algo así ?
- Sí,- respondió el extraño- exactamente eso.
Ambos enmudecieron, no porque no tuvieran qué decir, si no porque no sabían por donde empezar.
- Bueno, em... Vivimos aquí al lado, él es Rubén y yo soy Manuel pero me llaman Loro.
- Yo me llamo Samuel Cross, encantado.
- Ve con él a casa, -dijo Rubén- yo iré a por la comida y nos vemos allí.
- Y las pizzas? ¿Quien es este ? Preguntó Tania sin a penas sorprenderse.
- Las trae ahora Rubén,- le dijo Loro mientras entraban en el piso.- Este es Samuel, salió de una explosión de luz en el parque, viene del 2313.
- Vale, qué mas...- Tania ni se inmutó- ¿No ibas a traer una peli ?
- Es que con un visitante del futuro... creo que ya tenemos ciencia ficción para rato.
- Yo soy Mario- dijo sin apartar la vista de la pantalla del ordenador.
- Encantado.- le respondió Samuel.
- Aparta la cara de la pantalla un momento y mira esto...
- Esque justo ahora estoy...
- En serio...!
- Habee... Buaaaaa... Qué guapo! Qué es? ¿Es de algún cómic? Manga seguro, no?- Mario se separó por fin del ordenador y daba vueltas alrededor de Samuel analizando su atuendo.
- No es ningún disfraz- le dijo Loro- Os lo dije antes es una máquina del tiempo, viene del futuro.
- ¿ Lo de la explosión de luz y eso ? Ya - Respondió Mario incrédulo.- ¿ Qué mas ? Loro es el futuro líder de la resistencia y ha venido a matarlo, no ?
Se abrió la puerta y entró Rubén con las pizzas, a penas daba a basto entre quitar la llave de la cerradura y entrar con las cajas en una mano, se le atascó la llave, salió de golpe, golpeó las cajas contra el marco de la puerta y casi se le caen al suelo.
- Mecagüen... ¿ Se lo contaste ?- preguntó nada mas entrar.
- Sí, pero no me creen- le respondió Loro.
- Pizza, pizza, pizza- repetía Tania estirando el brazo sin salir de debajo de la manta.- hambreee..
Rubén puso las pizzas en la mesita del salón tras hacer un hueco entre tazas, vasos, bolis, ceniceros y cajetillas de tabaco y Tania y Rubén cogieron un pedazo cada uno y se sentaron en el sofá a ver la tele.
- Eso- dijo Rubén- vosotros a lo vuestro, como si no hubiese ningún visitante del futuro en casa...
- ¿ Pero tú también estas con eso ?- preguntó Tania.
- Y luego dicen que esta no pega...- dijo Mario en voz baja.
- ¿No puedes usar la máquina para demostrarles que es verdad?- Le preguntó Loro a Samuel.
- No, la máquina no la puedo usar así como así, en esta época no es posible recargarla y no puedo desperdiciar la batería que tiene.
- Dejadlo ya- insistió Tania- no nos vamos a creer semejante burrada, por muy currado que esté el disfraz de vuestro amigo. La próxima vez inventaos algo mas creíble.
- ¿ No trajisteis la peli ?- pregunto Mario.
- Seguro que tienes algún artilugio tecnológico que no sea posible hoy en día.- dijo Ruben- aunque no puedas usar la máquina algo tendrás que demuestre que vienes del futuro.
- Oye...¿ Podemos hablar en privado?- preguntó Samuel
- Sí claro, vamos a la cocina- Le dijo Rubén.
- No creo que tenga que demostrarles nada a vuestros amigos, es mas, ni debo ni quiero. Viajar al pasado ya es bastante peligroso, no puedo ir exhibiéndome y contando que soy del siglo 24 ¿ no lo entendéis ? solo necesito quitarme el dispositivo y me iré.
- Lo siento,- dijo Rubén- la verdad es que no lo pensamos. ¿ Necesitas que te ayudemos con eso?
- No viene mal- respondió.
Pasaron una hora en la cocina charlando sobre el futuro y comiendo pizza mientras desmontaban el dispositivo en partes para poder quitárselo.
- ¿ Cuál es tu historia ? le preguntó Loro mientras forzaba disimuladamente una pieza que no le salía- O sea...¿ cómo acabaste aquí ?
- Huyendo de unos robots, la verdad
- Venga...!- exclamó Rubén- ... y tú querías alquilar Matrix, esto es mucho mejor...
Era el dueño de una gran empresa de tecnología y comunicación.- continuó Samuel.- Se llamaba TRID. Hacíamos y vendíamos implantes, software, sistemas domotizados, droides domésticos, vehículos... tecnología para la vida cotidiana.
- Cotidianísima.- dijo Loro
Pero entonces estalló la guerra.- Siguió samuel- Los gobiernos de la Alianza de Banderas empezaron a presionarnos para que construyésemos material militar y nos negamos sistemáticamente a todas las peticiones, exigencias y amenazas.
Al menos mientras pudimos. Cuando se declaró la ley marcial todos los países de la Alianza pasaron a tener un único gobierno, un gobierno militar por supuesto. En aquel momento nuestras negativas dejaron de ser toleradas y fuí arrestado por negarme a colaborar.
Estube poco tiempo en la cárcel, el suficiente para tener una idea que a demás de sacarme de allí iba a salvar vidas.
Acepté colaborar con el ejército si ellos escuchaban mi propuesta de proyecto. No se lo pensaron, me necesitaban pues la balanza de aquella guerra se estaba precipitando en su contra y solo les pedía que me escucharan.
En primer lugar les dije que se necesitaban mas búnkers. Que podía encargarme de la construcción de una serie de complejos superseguros que cubriesen en capacidad a toda la población.
Por otro lado mi propuesta eran androides soldado. Se había intentado anteriormente incluso había algunos modelos en uso pero no se acercaban a la agilidad, velocidad e inteligencia de los soldados humanos. Yo podía hacerlo. No la parte de la inteligencia pero si la agilidad y velocidad. Les dije que podía crear unos droides soldados mas rápidos fuertes y ágiles que los humanos. Con un superavanzado software de combate y capaces de autorepararse y de reparar a otros androides. Los Beabots
- Beabots, - repitió Loro- ¿ les pusiste tú el nombre? Yo creo que les hubiera puesto... Terminators, ya sabes, como...
- Loro cierra el pico- le dijo Rubén.
- Ningun soldado tendría que salir del país. - continuó el señor Cross.- Podríamos llevar todas las operaciones desde aquí. ¿ Y qué ocurre si se hacen con uno de los androides ? me preguntaron. No pasa absolutamente nada, les dije. El hardware es el mismo que el de un droide de trabajo asi que no encontrarán nada nuevo ahí, el secreto del Beabot está en el software, y este se autodestruye si es manipulado por un usuario no autorizado.
Esa parte era mentira. Había una puerta de atrás y pistas para encontrarla. Nuestros enemigos, la Unión de Estados, no tardaron en saber como hacer sus propios droides de combate y todos los humanos pronto estubieron seguros en búnkers mientras sus líderes se enfrentaban desde lejos, manejando sus robots sus tanques y sus bombas, como si se tratase de un videojuego muy caro. Esa era mi intención.
En esa etapa de la guerra a penas hubo bajas humanas, pero el mundo quedó destrozado, no quedó absolutamente nada. Cuando cesaron los bombardeos y la gente salió de los búnkers nadie tenía nada, ni donde vivir , ni trabajo, ni dinero, nada de nada. Ahí empezaron las bajas humanas. Los robots siguieron luchando cuerpo a cuerpo los de un bando contra los de otro aunque nadie los manejase.
En una etapa de la guerra los ingenieros de la Unión desarrollaron un arma que desactivaba robots en masa ¿ Qué hizo la Alianza al respecto ? Hacer sus robots indesactivables y desarrollar un arma similar que desactivara los robots de la Unión, lo que les obligó a hacer indesactivables sus robots también. Ningún robot de combate se podía desactivar ni por sus propios dueños.
Así que tras la guerra los robots se reparaban utilizando la chatarra que poblaba lo que antes eran ciudades, con la que ademas construían otros robots y seguían luchando sin cesar. Morían y resucitaban. Era una guerra sin fin y sin sentido.
Muchos huyeron al futuro antes de entrar en los bunquers. Yo me lo planteé muchas veces pero el futuro era muy incierto, la cosa no pintaba bien y posiblemente lo encontraría todo peor allí. Entonces ya era tarde, ya estaba claro que no habría nada en el futuro mas que aquellos que huyeron y se encontraron con... nada, quizá una guerra eterna entre robots, o quizá un mundo desértico.
Tras la guerra el ejército seguía necesitando mis servicios pero yo decidí ponerme a trabajar en un dispositivo de salto , pero no iría al futuro sino al pasado.
Siempre había estado prohibido, incluso se decía que era imposible pero ¿ porqué prohibir algo que es imposible? Porque no lo es en absoluto. Mi proyecto de fin de carrera fue un dispositivo de salto temporal. Estaban muy de moda en mi época de universidad, hacía mucho que existían pero ese año hubo un boom comercial. Todo el mundo quería uno para saltarse unos años. Solo permitían viajar hacia adelante así que pocos saltaban muchos años pues sabían que no podían volver atras, algunos saltaban dos o tres años, otros huían cinco o diez años al futuro para salir de una mala racha, y unos pocos se iban lo mas lejos posible.
Para mi proyecto tuve que estudiar a fondo el logaritmo que hace funcionar al dispositivo y al hacerlo vi que no había ningún impedimento para hacer funcionar la máquina a la inversa. ¿ Porqué no se podía saltar hacia atrás entonces ?
Lo consulté con mi tutor y fue cuando supe que estaba prohibido. No solo saltar al pasado, también estaba prohibido construir algo capaz de hacerlo. El motivo era sencillo, cualquier cambio en el pasado podría cambiar acontecimientos futuros, y si la gente empezaba a saltar libremente adelante y atrás el presente en el que vivíamos cambiaría continuamente, y sería catastrófico. Estaba rotundamente prohibido.
Tras la guerra, cuando la gente pobló las ruinas de las ciudades, el ejército humano repartía comida y bebida entre los desesperados ciudadanos ademas de oxígeno, pues gran parte de los árboles habían sido destruidos.
- Me alegra saber que sobrevivieron tanto,- dijo Rubén- no esperaba que hubiese naturaleza dentro de tantos años.
-¿ Naturaleza ? No, que va.. Los pocos árboles naturales que quedan están en museos. Unos aparatos parecidos a vuestras farolas procesan el dióxido de carbono y lo convierten en oxígeno y, bueno... los llamamos árboles. La pureza de ese oxígeno es muy inferior a la de esta época por eso cuando llegué me costaba tanto respirar, y aun me cuesta, mis pulmones no están adaptados a una aire tan puro.
- Y eso que estamos en el centro de la ciudad, si lo llevamos al monte se asfixia el pobre.
- Je, je, como decía los soldados repartían comida y demás entre la gente pero los recursos pronto se agotaron y los soldados eran atacados por los gentíos hambrientos cada vez que se dejaban ver. Entonces los ejércitos se retiraron de las ciudades y la sociedad terminó de derrumbarse. Sin un orden establecido, sin autoridad, se impuso la ley de la jungla y cada uno sobrevivía como podía. Era el fin del mundo.
- Ala..- exclamó Loro,- ¿ no estarás exagerando un poco ?
- Antes de la guerra no quedaban en todo el planeta animales que no fueran de granja y lo mismo con los vegetales y hortalizas, después, ni eso. La sociedad se había derrumbado, no había comida, ni hospitales, ni nada, y la gente moría sin parar de enfermedades de hambre o en un fuego cruzado entre robots. Pronto no quedaría nadie. Para nosotros... era el fin del mundo...
Mi situación era privilegiada pues estaba prácticamente secuestrado por el ejercito obligado a hacer estudios sobre los robots para encontrar la manera de desactivarlos.
Estaba estudiando los robots que en un principio yo había creado, los que el enemigo nos había copiado y las múltiples reparaciones y reconstrucciones que hacían los propios robots utilizando todo tipo de piezas y tecnología que encontraban, creando en ocasiones modelos totalmente diferentes al los iniciales.
En realidad hacía que los estudiaba, les daba algunos resultados de vez en cuando. Pero aquello me daba la excusa perfecta para buscar todo lo que necesitaba para construir un dispositivo de salto y viajar al pasado.
- Para así poder cambiar el futuro.- Dijo Rubén con la intención de completar la historia.
- Por supuesto que no. - respondió - No se puede cambiar el futuro ¿ es que no escucháis? cualquier cambio podría ser catastrófico, podría significar...
- ¿ El fin del mundo ?- Interrumpió Loro- a no, me olvidaba - dijo con ironía- eso es lo que pasará si NO cambias nada.
Samuel había acabado de guardar en una caja el dispositivo y todos sus complementos y la cerraba con cinta en silencio mientras Loro y Rubén esperaban una respuesta.
- ¿ Es que no vas a decir nada ? Reclamó Rubén.
- ¡ Es que no veo cómo ! - dijo al fin- ¿Qué puedo hacer yo ? ¡ No puedo evitar una maldita guerra ! No hay nada que pueda cambiar.
- Algo habrá - le dijo Rubén- podemos ayudarte a pensar en algo, quédate unos días y piénsalo con calma, puedes ocupar la habitación pequeña, actualmente no la usa nadie.
- Está bien, lo cierto es que no tengo a donde ir ni tengo dinero así que... Me quedaré y... quizá lo piense.
- Es la puerta de enfrente- dijo Loro.
- Pues no es tan pequeña- dijo al ver la habitación por dentro- es el tamaño normal en mi época.
- Pues le llamamos el zulo- dijo Rubén.
Le dijeron a Tania y a Mario que Samuel era primo de Rubén y que se quedaría unos días. A la mañana siguiente, Mario presenció una curiosa escena, estaba en el baño y escuchó la voz de Samuel hablando solo en la cocina y se acercó en silencio para escucharlo.
- Hazme un café con leche- le decía a la tele mientras tocaba la pantalla con un dedo repetidamente- ... Café con leche... ¿ cómo funcionará esto ? un café con leche por favor. As-TRID ¿ Puedes echarme una mano ?
- " Eso no es una cafetera Samuel " - Le respondió su asistente- " La cafetera está a tu derecha, el objeto metálico con un asa."
- ¿ Y como funciona ?- preguntó mientras la cogía.
- " Debes desenroscarla por el centro separándola en dos partes, en la parte inferior debes colocar agua, en el cazo de en medio se coloca café natural molido, se vuelve a enroscar la parte superior y se coloca al calor, el agua hierve y asciende a traves del café molido a la parte superior, donde una vez finalizado el proceso estará el café preparado. La leche deberás añadírsela despues manualmente."
- ¿ Y de dónde voy a sacar café natural ?
- " En esta época es algo muy común, podrás encontrarlo en uno de los muebles superiores, probablemente en uno que esté cerca de la cafetera."
- Al final va a ser verdad que vienes del futuro- dijo Mario tras presenciar la escena.
- Quien...?, Oh... pensé que no había nadie.- Dijo Samuel.
- Sí, debería estar en clase pero... da igual ¿ qué era eso ? ¿ con quién hablabas ?
- Em... era yo haciendo voces...
- Venga ya!- le interrumpió Mario- lo escuché todo, es como una voz robótica de mujer y te acaba de explicar como hacer un café ¿ de donde viene esa voz ? no veo...
- Es As-TRID- le respondió Samuel- mi asistente electrónico, está en este colgante.
- " Hola Mario "- dijo As-TRID- " encantada de conocerte."
- Waw, aun me cuesta creer que vengas del futuro pero lo del café fué batante raro y lo de ese aparato... es sin duda impresionante. ¿ cómo sabe...? ¿ cómo funciona ?
- Puede ver, oir y hablar y puede conectarse a cualquier red wifi del mundo, no hay muchas en esta época, y menos en esta zona, afortunadamente el alcance de As-TRID es ilimitado.
- ¿ Wifi ?- preguntó Mario.
- Conexión inalámbrica a internet.
- A, sí eso...
- As-TRID es muy útil,- añadió- no lo sabe todo pero... casi.
- " Si eso era un cumplido gracias " - dijo As-TRID.
- Entonces - dijo Mario- ¿ es verdad eso de que vienes del futuro...?
- En realidad sí. Preferiría que vuestra amiga siguiese creyendo que soy un primo de Rubén, pues cuantos menos lo sepan mejor así que... bueno, no se lo digas a nadie.
- Em... Claro- respondió Mario.
- Oye sé que igual es mucho pedir pero lo digo en serio, no digáis nada por favor.
- Tranquilo- le respondió Mario- si lo contase nadie me creería así que...
- Gracias
- ¿ Y de qué... año dices que vienes?- Preguntó Mario con gran curiosidad por saber mas.
Prepararon el café y desayunaron mientras Samuel le contaba toda la historia. A Mario le gustaba mucho la informática y se mostró especialmente interesado en este tema.
- ¿Y estos asistentes electrónicos son el equivalente al ordenador actual?
- No.. en absoluto- le respondió Samuel- As-TRID es un sistema de búsqueda instantánea y un asistente de tareas pero no tiene un gran procesador. El equivalente al ordenador actual es nuestro cerebro.
- ¿ Nuestro cerebro ?- preguntó Mario- ¿Quiere decir que no habrá ordenadores en el siglo 24?
- No exactamente lo que tú entiendes por ordenadores. Llevamos un chip en el cerebro llamado Bionet que nos permite realizar tareas similares a las que realizáis hoy en día con los ordenadores y por supuesto muchas mas. Lo malo es que el receptor Wifi no tiene tanto alcance como el de As-TRID.
- Aaa... O sea que el ordenador es vuestro cerebro... pero, literalmente... - se quedó pensandolo un rato- ... mola. Tenéis redes inalámbricas por todas partes, en internet hay millones de veces mas contenido, y el ordenador es vuestro cerebro.
- Este café está increíblemente rico...
- Entonces técnicamente lo sabéis todo... Bueno mucho... Y...¡¡ podéis comunicaros por telepatía..!!
Siguieron hablando del futuro toda la mañana hasta que a mediodía llegaron Loro y Rubén, los lunes Tania no comía en casa. Mario les dijo que ya lo sabía todo y durante la comida no se hablaba de otra cosa. Por supuesto, el tema que Samuel quería evitar volvió a salir ¿ porqué no cambiar el futuro? esta vez Samuel se mostró mas a favor de la idea, estaba de acuerdo pero no sabía como podría evitar la guerra.
Los chicos propusieron algunas ideas pero todas eran disparatadas o sacadas de películas. El dispositivo tenía energía para saltar 200 años exactos, llegaría a 2199, 30 años antes de la invención del dispositivo de salto, 72 años antes del nacimiento de Samuel y 111 años antes del inicio de la guerra, . ¿Qué podría hacer desde allí ?.
- ¿ Echamos un Tony Hawk ?- Preguntó Mario con el mando de la Play en la mano tras levantarse de la mesa.
- No... - respondió Rubén- salgamos para que Samuel vea el siglo XX.
- Sí, vayamos a tomar unas cañas- dijo Loro- es lo mas propio de la época y el lugar.
Pasaron la tarde entre cañas y pinchos de un bar a otro. En el tercero se encontraron con Lidia y Elena, dos amigas de la facultad, y poco después llegó Tania que venía del ciber. Juntaron otra mesa y siguieron de charla. Samuel tenía un acento extraño por lo que resultaba creíble la historia del primo extranjero, y a nadie le parecía raro que todo fuese nuevo para él.
Por supuesto la cerveza del siglo 24 era agua comparada con la que Samuel estaba bebiendo y acabaron teniendo que llevarlo a casa y meterlo en la cama.
Cuando despertó al día siguiente la pequeña habitación con estrellitas fluorescentes en el techo daba vueltas a su alrededor y la cabeza le iba a explotar, le dolía con una intensidad variable, al compás del ritmo del corazón, como si le estuviese latiendo dentro del cráneo.
- Aaah...- gimió cuando cobró consciencia- As-TRIIIID..., me duele... Me duele mucho la cabeza.
- " Puede que las cervezas de ayer hayan tenido algo que ver "- le respondió- " toma, instálate esto en el Bionet."
- Gracias, uf que alivio.
-" Hasta el 2018 el alcohol produce lo que llaman resaca "- continuó As-TRID- " que no es mas que un síndrome de abstinencia, ese malestar general y ese dolor de cabeza que tenías hace unos segundos es tu cuerpo pidiendo mas alcohol."
- Uf, tengo mucha sed
- " No hay programas para eso, te aconsejo agua."
- Je, je..- rió Samuel con burla- a que te desactivo el modo graciosilla.
- " Veo que tú aun lo conservas a pesar de la resaca." - Respondió As-TRID devolviendo la pelota.
- Cállate.
Lentamente y con dificultad se levantó de la cama se duchó y fue al salón donde estaban sus compañeros.
- ¿ Es que no tenéis clase hoy ?- preguntó.
- No, hay huelga.- respondió Tania.
- ¿ Por qué ?
- No sabemos- respondió ella mientras cambiaba el juego de la play - ¿ Qué tal estás ? Ayer acabaste bonito.
- Bien, estoy bien- respondió- solo algo cansado.
- ¿ Qué pasa !?- Exclamó Rubén - Otra vez no !!
Los 4 observaban fijamente la pantalla en negro. La videoconsola se había colgado.
- Se quedó pillada- dijo Loro
- Apágala y enciéndela- le dijo Rubén a Tania que estaba de pié.
- Ponla de lado- añadió Mario
- Dale unos golpecitos- dijo Loro
- ¿ Alguien mas quiere aportar algo ?- preguntó Tania con ironía.
- Si me permites- Dijo Samuel- soy experto en electrónica.
En unos minutos había encontrado la avería, desmontó la videoconsola, cambió unos cables, hizo unos agujeros, cortó, soldó y cerró, todo con la misma herramienta. Una especie de bolígrafo con una luz azul en la punta.
- Ahora no volverá a fallar, además le hice unas modificaciones, confío en que vaya un poco mejor.
- Genial. - Dijo Rubén- tengo que traerte la mía que tiene el mismo problema que esta, o al menos muy parecido.
- Si es que ya las hacen para que duren un par de años y se estropeen - dijo Tania.
- Esto y todo - Añadió Loro.
- ¿ Cual pusiste ?- Preguntó Mario
- El Tony
- No... otra vez no... pon uno de coches - protestó Loro. - el Need For Speed o el Driver.
- ¿ Dónde está Samuel ?- Preguntó Rubén.
- Habrá ido al baño.
- Quería preguntarle como son los videojuegos en su... em...- Interrumpió su frase al recordar que Tania estaba delante.
- Serán igual que aquí, digo yo,- Dijo ella- es sudamérica no la antártida.
Al rato Samuel entró en el salón con el dispositivo de salto casi puesto del todo y sujetando en las manos las partes que le faltaban por poner.
- Ayudadme a terminar de ponérmelo tengo que irme- Dijo nervioso y alterado.
- Creo que lo tengo, había pensado como dejarme un mensaje a mi mismo y asegurame que lo leyese 112 años después, en 1199 ya existen los IR que al ser dispositivos intransferibles ya no son necesarias las contraseñas igual que en los Bionet, el sistema te reconoce, así que si creo una cuenta en cualquier servicio online mi futuro yo podrá acceder también. Puedo comprar un alojamiento y pagar por adelantado 112 años así en 1199 le llegará un aviso de que su página está a punto de caducar, una página que él no creó, entrará para verla y se encontrará con mis instrucciones.- Hablaba tan rápido que apenas se le entendía nada- Se me ocurrió ayer pero el problema es que no tenía nada que poner en ese mensaje pero creo que ya lo tengo. Vamos, tenemos que ir al parque en el que salté hacia atrás- dijo saliendo ya por la puerta del piso.
Bajaron todos a la calle, Simon caminaba y hablaba a toda velocidad mientras los chicos intentaban seguirle y entenderle, sobre todo Tania que creía que Samuel se había vuelto loco.
- Os lo explicaré con mas calma cuando vuelva, para vosotros solo serán unos segundos, bueno... eso si todo sale bien. Y una cosa mas, me alegro mucho de haberos conocido, fue breve pero... muy bueno, espero que os vaya muy bien. As-TRID ¿ todo listo ?
La máquina emitía un zumbido que aumentaba de intensidad y la imagen de Samuel vibraba cada vez mas.
- " Cuando quieras " - respondió ella- " Adiós chicos, fue un placer."
- Será mejor que os aparteis un poco- dijo Samuel gritando bajo el ensordecedor zumbido- Adelante As-TRID.
- " 3..., 2..., 1..., saltand...."
Y desaparecieron en una explosión de luz que no emitió ningún sonido.
Tania estaba con la boca abierta hasta el suelo, aun no se creía lo que acababa de ver.
- Por cierto... - dijo Rubén- ...lo de que venía del futuro y todo eso... era verdad.
- No jodas .- respondió Tania irónicamente mientras seguía mirando hacia el sitio donde desapareció Samuel.
- Dijo que volvería en unos segundos- dijo Loro- pero su despedida...
- Sí... a mi también me dio esa impresión - dijo Rubén - parecía que se despedía para siempre.
Y entonces se produjo otra explosión y ahí estaba él de nuevo. En cuanto apareció cayó sobre sus rodillas luchando por respirar y los cuatro corrieron a ayudarle. Lo sentaron y le dieron de beber, estaba aturdido y confundido y su imagen vibraba como la primera vez que llegó.
- ¿ Te encuentras bien ? - preguntó Tania.
- Tu dispositivo de salto parece diferente - Dijo Mario - ¿ es otro ?
- ¿ Quienes sois ?- Preguntó Samuel cuando ya parecía estar mejor.
- ¿ No nos recuerdas ? - Le preguntó Loro - viviste dos días con nosotros y te fuiste hace un minuto al futuro para salvar el mundo... por cierto ¿ funcionó ?
- Creo que ya empiezo a entender...- dijo para sí mismo- por eso tanta precisión en lugar y fecha de destino. Chicos me temo que no soy la misma versión de Samuel Cross que vosotros conocéis.
- Vereis, em... - continuó - no se si debería hablar de esto pero supongo que si me mandó aquí es porque confía en vosotros...
- ¿ Qué os parece si nos lo cuenta en el piso ? - dijo Mario - no hay mucha gente en la plaza pero la que hay acaba de ver a un tío salir de una explosión de luz y están flipando.
- Sí, - dijo Rubén - será mejor que nos vayamos.
Una vez en el piso todos estaban raros, no sabían muy bien como actuar.
- Entonces... - dijo Tania rompiendo el hielo - tú eres el Samuel del futuro.
- Del pasado - le corrigió él - o sea... con respecto al Samuel que conocéis... yo era dueño de una gran empresa de tecnología y comunicación. Se llamaba TRID. Hacíamos y vendíamos implantes, software...
- Esa parte ya nos la sabemos - Dijo Mario- ¿ Podrías saltar hasta...?
- Sí claro, hasta la variable - dijo él antes de continuar. - El caso es que cuando estalló la guerra y justo antes de que me encerraran por negarme a colaborar recibí un mensaje que decía que estaba a punto de caducar un dominio a mi nombre desde hacía 112 años, supuse que era un error pero el nombre de la página era Root, el nombre que yo quería haberle puesto a mi empresa, así que despertó mi curiosidad.
- ¿ Y por qué le pusiste TRID ? - Preguntó Mario- es un nombre un poco raro.
- A los inversores les pareció genial - Dijo Samuel con resignación.
- La página... - Dijo Tania pidiendo que volviese a la historia.
- Entré en la página y me encontré con un mensaje, - continuó Samuel - " Como sabes por tus estudios para el proyecto, saltar al pasado es posible ", así empezaba, "pero por muy peligroso que pueda ser realizar cambios en el pasado esto es una cuestión de fuerza mayor. Soy una versión futura de ti, y te dejé este mensaje en el pasado porque debes salvar el mundo."
Una página a mi nombre creada 112 años antes, con el nombre que le quería poner a mi empresa y afirmando que sé que los dispositivos pueden saltar al pasado... No tuve duda de si era cierto o no, cuando leí esas líneas se me hizo un nudo en el estómago porque supe que tenía que salvar el mundo.
Así que seguí aquellas instrucciones al pié de la letra. Se me había ocurrido una idea que barajaba como una posibilidad, no quería ceder a las exigencias del ejercito pero con aquella idea podría salvar vidas y evitar la cárcel.
- Robots soldado- dijo Loro.
- Exacto - respondió - pero estos serían diferentes a los que hizo mi alterno en su línea temporal. Tendrían algo extra: fallos.
En el mensaje contaba que en el pasado había tenido que arreglar una antigua pieza de tecnología cuyos dueños, supongo que vosotros, aseguraban que en su época fabricaban todo programado para estropearse al cabo de un tiempo determinado. Decía que eso era lo que debía hacer con los robots.
Siguiendo las instrucciones añadí un código de desactivación oculto para una fecha concreta, el día que acababa la guerra. Ese día los supuestamente indesactivables Beabot se derrumbaron al mismo tiempo. Pero mucho antes de estropearse los robots se estropearon sus armas, cuando cumplieron los 10 meses de uso el modo sónico dejó de funcionar dejándolos sólo con un arma de pulso.
- ... y eso significa...- dijo Tania
- Que podían derribar a otros robots, freirles los circuitos pero no tirar paredes. Las bombas y los tanques destrozaron bastante las ciudades pero no tanto como lo hubieran hecho las armas sónicas de los Beabots durante 3 años.
Así que cuando la gente saliese de los búnkers la guerra de máquinas ya habría terminado y las ciudades estarían mínimamente bien.
La cosa no pintaba tan bien para mi. Tras el "fracaso" con el software "incopiable" de los soldados Beabot y el "fallo" de las armas, el ejército no pasaría por alto un error mas e irían a por mi.
Pero yo ya contaba con ello, y en el momento que los robots fallaron ya estaba en las coordenadas que indicaba el mensaje listo para saltar al pasado con un dispositivo modificado.
El resto de la historia ya la conocéis.- remató
- Wau, - dijo Loro - ayudamos a salvar el mundo... y nadie nos creería si lo contásemos...
- Y luego criticamos los tópicos cinematográficos... - añadió Rubén.
- Yo aun no tengo muy claro que esté despierto - dijo Mario- no se os ocurra pellizcarme.- dijo mas alto.
- ¿ Qué tienes pensado hacer ahora ? - preguntó Tania.
- Me quedaré en esta época, en el pasado no pueden encontrarme. Buscaré un trabajo y un piso... me adaptaré.
- ¿ Y lo que dejas atrás ? Delante ? O como sea ?- dijo Tania confusa sin saber como formular la pregunta.
- Lo cierto es que no dejo nada- respondió Samuel- me quedé huérfano siendo niño y dediqué toda mi vida al trabajo por lo que no tengo ni familia ni amigos. Ni si quiera me da pena dejar atrás mi empresa pues ya poco tenía que ver con la que fundé en su día, su crecimiento supuso el deterioro de su espíritu, la intervención de inversores, accionistas, políticos... No es lo que era, bueno no será lo que... , ... Bah...!
- Con tu habilidad y conocimiento de la tecnología no te será difícil conseguir un trabajo - dijo Mario- el problema es que tus títulos no valen en esta época, oficialmente no tienes estudios, ahora que lo pienso, tampoco papeles.
- " Eso no será un problema " - dijo la voz robótica de As-TRID - " puedo falsificarlos, no físicamente pero sí puedo añadirte en el sistema, tendrás que declarar que perdiste tus documentos y solicitar unos nuevos."
- Bueno, supongo que podrás empezar de nuevo - dijo Rubén - quizá podrías volver a crear tu empresa.
- Y llamarla como querías - añadió Loro.
- Root... - dijo Samuel pensándoselo - ... podría ser...
FIN
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